Dicen que hasta los seres más sensibles tenemos la capacidad de sentir los seres espirituales, los del más allá. ¿Lo han sentido alguna vez? Bueno, yo sentí algo interesante, llámenlo sensibilidad, locura, paranoia o simplemente producto de la imaginación.
Lo que si sé, es que dicha sensación me puso pensar en algo que muchos nos cuestionamos a diario y también tomamos por desapercibido, la vida, ¿qué es la vida?
No me considero fanática de Soda Estero, no conozco muchos de sus álbumes o canciones más que dos o tres que resuenan en mi cabeza por ser las más populares. Conozco un poco de su historia artística en documentales y trayectoria musical a través de los años.
Se dice que escribir poesía y escribir canciones son dos técnicas totalmente diferentes y que la única no tiene nada que ver con la otra. Personalmente, creo que las en las letras de Gustavo Cerati se esconde un cierto nivel de pureza, de sensibilidad, de sentimiento, de historias, a eso le llamo yo poesía.
Frases como:
“Quiero que me trates suavemente”
“Tu presencia es mi pesadilla”
“Me dejarás dormir al amanecer entre tus piernas”
“Me verás volar por la ciudad de la furia donde nadie sabe de mí y yo soy parte de todos”
“Tal vez ni curiosidad es más grande que tu miedo”
Han marcado la historía de una banda que se ha vuelto un icono en el Rock en español.
Hace poco tuve la oportunidad de asistir al concierto de Soda Stereo y ciertamente algo quedó claro. Lo que uno haga vivo, ya sea bueno o malo, se seguirá reflejando aun cuando no estemos en tierra.
Cerati, no estuvo físicamente en este, pero vaya que se sintió presente en cada una de sus canciones, su espacio al igual que su legado iluminó corazones.
¿Entonces me pregunto, que es la vida? Cerati nos recordó que la vida es solo un momento, un espacio que hay que saber aprovechar para sentir nuestra propia sensibilidad y crear la historia que queremos vivir.