Tu dureza y berraquera me recuerda lo diminutos que somos en esta tierra
tu dulzura y tu calma hace que todos mis dolores se desaparezcan entre tu mirada.
Tu alegría espontánea es un llamado para enfocarnos en lo gratificante más no en lo importante.
Cubres tu tenacidad con tu belleza, eres Bella y tu ser comprueba lo cruel que es la sociedad ante tu presencia.
No has enseñado que el amor, la humildad y la felicidad no lo describe un nombre ni una identidad si no la esencia y la sencillez ante los demás.